Santa Claus llega, a los Países Bajos, desde España

Si estabais convencidos de que san Nicolás vive en Laponia, en un lugar frío del norte de Europa, ya os podéis olvidar, ya que en Holanda y en algunas colonias de Bélgica dicen que vive en España, y que cada año, el 5 o el 6 de diciembre, es quien lleva los regalos a los niños en los Países Bajos.
El venerable anciano Saint-Nicolaas, (nombre que deriva de Sinterklaas), llega a Holanda desde España en un vapor, y es el santo patrón de los niños, de la ciudad de Ámsterdam y de los marineros. Es precisamente este estrecho lazo con los marineros lo que explica el porqué llega a Holanda en un vapor.
Pero no viaja solo, sino que lo hace acompañado de unos ayudantes negros conocidos como “Pedritos los negros” (Zwarte Pieten), que lanzan entre los asistentes unas galletitas llamadas Pepemoten. Y son quienes se encargan de repartir los regalos, colándose por las chimeneas de las casas.
Al llegar a Holanda Sinterklaas, y desembarcar, monta en su caballo blanco Amerigo.
Sinterklaas porta los símbolos episcopales, cayado dorado, mitra y capa roja..
La tradición, no obstante, está basada en la figura de San Nicolás de Bari, pero con elementos paganos, ya que tiene paralelismo con el dios Odin y con su caballo blanco de ocho patas Sleipnir.
La fiesta de Sinterklaas se celebra el 5 de diciembre en los Países Bajos y el 6 de diciembre en Bélgica. También se festeja, aunque menos, en Austria, Suiza, en la República Checa donde se le conoce como Mikulas, y en Luxemburgo, donde se le llama kleeschen.
En los primeros tiempos se celebraba solo en el este, pero a partir del siglo XVIII es una festividad reconocida en todo el país.
Ya en el siglo XV existía la costumbre de llenar con monedas los zapatos de cuatro niños pobres, en aquel entonces se dejaban en la iglesia, y lo que se recogía de las ofrendas de los feligreses más ricos, se repartía entre los pobres el 6 de diciembre.
Al convertirse en una celebración familiar comenzaron a ponerse zapatos en las casas junto a las chimeneas, y es en dichos zapatos dónde se depositan los regalos. Normalmente juguetes y golosinas.
Sinterklaas y Holanda están unidos desde el año 342 y su llegada desde España, viene haciéndose todos los años desde 1934, excepto en el 1944 debido a la guerra.
Antes de la festividad, juegan al amigo invisible, sortean quien hace regalo a quien. Los obsequios se envuelven de forma caprichosa para disimular su contenido y, a menudo, se acompañan de poemas y juegos de palabras, es un momento idóneo para gastar bromas a la familia.
Tras la rebelión de las provincias de Holanda contra la Corona española se intentó eliminar la festividad, por contener muchos elementos paganos, pero la fiesta era tan popular que los esfuerzos de los calvinistas fueron en vano.
El origen de que Pedrito sea negro parece estar en que ese personaje, en su origen, era el diablo al que Sinterklaas obligó a hacer el bien.
Aunque parece más lógica otra idea, que fuera un criado moro, de ahí su color.
Aún habría otra versión más dulce, que es aquella en la que san Nicolás liberó a un niño etíope en el mercado de esclavos de Myra, es mas, todo apunta que el niño pudiera llamarse Piter (nombre derivado de Petrus).
En agradecimiento el niño se quedaría al lado de San Nicolás para ayudarle.
Sin embargo otros dicen que Pedrito no es sino un deshollinador italiano, por lo que el color negro sería debido al hollín, por eso Pedrito lleva una vara como las usadas por ellos y por eso sube a los tejados con toda facilidad. La ropa que lleva es una copia de la típica de los de deshollinadores italianos.
Hasta la Segunda Guerra Mundial San Nicolás sólo tenía un ayudante, pero, después de ser liberado Flandes, los soldados ayudaron a organizar la primera fiesta de San Nicolás de la posptguerra, y fueron ellos quienes pensaron que, si un Pedrito el negro resultaba simpático, un grupo de ellos lo sería mucho más, desde entonces son varios los que acompañan a San Nicolás.
Cada Pedrito tiene asignada una tarea, uno es guía, otro cocinero, y así hasta un largo etcétera.
Los Pedritos son traviesos y divertidos, son los que ponen la nota jocosa, y, si te portas mal te pega con la vara y te mete en una bolsa. Por el contrario es Sinterklaas quien pone la seriedad.
Son varias las canciones que recogen esta tradición, es decir, que hacen mención a Sinterklaas.
Por ejemplo encontramos la tradicional “Zie ginds komt de stoomboot” que, traducido, sería: “Mira, allí viene el barco de vapor”.
Otra muy cantada es “Zie de maan schijnt door de bomen” (Mira la luna brillando a través de los árboles ).
Otro villancico famoso es “Sinterklaasje, kom maar binnen met je knecht” (Sinterklaas, entra con tu paje)
Podríamos seguir con todo el repertorio, pero, a modo de ejemplo, dejaremos una coplilla en su idioma original y su correspondiente traducción:
Sinterklaas kapoentje
gooi wat in mijn schoentje
gooi wat in mijn laarsje
Dank je Sinterklaasje

San Nicolás kapoentje (*)
deja algo en mi zapato
deja algo en mi bota
Gracias, San Nicolás
(*) El origen de esta palabra está relacionado con otro personaje ficticio de los Países Bajos, Klaas Kapoen, y con el hecho de que rima fácilmente con schoentje (zapatito).
Aunque la fiesta y reparto de regalos se lleva a cabo el 5 o 6 de diciembre, Sinterklaas llega a mediados de noviembre a los Países Bajos. A partir de entonces los niños ponen zanahorias en sus calcetines para el caballo de Sinterklaas, por si pasa alguna noche y les deja algún regalo. Así transcurren tres semanas llenas de ilusión.
Pero ya ha quedado dicho que el nombre de Sinterklaas está basado en el de san Nicolás.
San Nicolás nació en el año 280 en Pátara, (Lycia, o País de los lobos). Perteneciente al Asia menor, lo que hoy es Turquía, cuando formaba parte del Imperio Bizantino.
Se cuenta que san Nicolás, al nacer, se mantuvo en pie tres horas. Sus padres eran ricos comerciantes, pero muy piadosos, y, la tradición nos trasmite, que el pequeño Nicolás les decía a sus padres que tenia que ser pecado no repartir entre los necesitados todo lo que Dios le había dado a su familia.
De joven dudó entre seguir con los negocios del padre o dedicarse a la vida religiosa, tal y como quería su madre.
Pero pronto supo elegir. Siendo muy joven perdió a sus progenitores que estaban dedicados a cuidar a los enfermos de la peste que entonces asolaba la ciudad.
Esto hizo que se dedicara a cuidar a los desvalidos, en especial a los niños, y, entre ellos repartió todo lo que había heredado.
Se cuenta el caso de un caballero, ya viejo y enfermo, que, al no poder casar a sus hijas, iba a tomar la determinación de prostituirlas. Nicolás dejó una noche una bolsa de monedas de oro en la casa del hombre para que pudiera casar a una de las hijas. En los días posteriores dejó otra bolsa para que pudiera casar a la segunda. Pero al ir a dejar la tercera bolsa le sorprendió el caballero y fue quien comenzó a contar la caridad del muchacho a pesar de los ruegos de que no contase nada a nadie.
Era tal su amor a los niños, que también se conoce otra historia en la que resucitó a tres infantes a los que un carnicero había troceado y guardado sus restos en salmuera.
Nicolás fue a visitar al carnicero y éste le agasajó con todo lo mejor que tenia en su despensa. En esas fechas era típico comer, hasta saciarse, productos de la matanza del cerdo.
En cierto momento el santo le dijo al carnicero: “Del pequeño salado yo quiero comer, que hace siete años que se encuentra en salazón”, y, en ese mismo momentoal, los trozos de los niños se unieron y resucitaron.
A los 19 años se hizo sacerdote, y, posteriormente, se convertió en obispo de Myra.
Murió el 6 de diciembre del año 342 (de ahí la celebración de su festividad en esta fecha).
Fue santificado por la Iglesia Católica, pero cuando la región de Licia cayó en manos de los musulmanes, en 1087, la Iglesia decidió trasladar los restos a Bari, el antiguo reino de las dos Sicilias, donde reinaría Carlos V.
Bari formó parte del reino de Nápoles que fue conquistado por Alfonso V de Aragón en 1442. Entonces la ciudad pasó a pertenecer Aragón y después a España hasta el siglo XVIII, por ese motivo surge la tradición de que Sinterklaas viene de España, y, por simplificación, de Madrid.
¿Y cual es la explicación del porque el nombre de Sinterklaas dio origen al de Santa Claus?
Pues bien, en el siglo XX, la ciudad norteamericana de Nueva Amsterdam era colonia holandesa, ellos tenían como tradición a Sinterklaas. “Americanizando” el nombre se convertiría en Santa Claus.
Ésta transformación del nombre de San Nicolás en Santa Claus ha alcanzado incluso a la ciudad de Demre, levantada sobre las ruinas de lo que fue Myra.
San Nicolás es el santo más importante de la Iglesia Ortodoxa Rusa, por lo que la ciudad atrae a multitud de turistas rusos.
Por este motivo, el gobierno ruso regaló a Demre una escultura de bronce del santo, escultura que se colocó en la plaza frente a los restos de lo que fue la iglesia medieval de San Nicolás.
Pero en 2005 Suleyman Topcu, que era el alcalde de Demre, pensó que la escultura de Noel Baba (Papá Noel o Santa Claus) atraería más turistas que la escultura de San Nicolás. De este modo la estatua de bronce de Sinterklaas se trasladó a un lugar en el que no destacaba sobre la de Papa Noel (entre las ruinas de la iglesia). Y la “flamante" escultura de plástico de Papa Noel ocupa el lugar principal en la plaza.
Bendito Sinterklaas!!!.
marian tarazona
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*NOTA: Las imágenes han sido obtenidas de la red"

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